domingo, 13 de diciembre de 2015

10 consejos de un sabio chino sobre el poder


13 de diciembre de 2014

10 consejos de un sabio chino sobre el poder

Todas estas reflexiones son el fruto de una vida como funcionario estatal, de su formación con las enseñanzas éticas de Confucio y su retiro del mundo a los sesenta años para dedicarse al aprendizaje del Taoísmo.


10 consejos de un sabio chino sobre el poder. Huanchu Daoren
10 consejos de un sabio chino sobre el poder.
Huanchu Daoren
Escrito a finales del Siglo XVIII por Huanchu Daoren, es la expresión de toda una vida llena de experiencia y sabiduría.

1. Quienes viven de manera virtuosa pueden estar afligidos por un tiempo, pero quienes dependen de adular al poder se hallan siempre desamparados.

2. Cuando estás oyendo constantemente palabras ofensivas y tienes siempre en mente algún asunto irritante, sólo entonces tienes una piedra de afilar para desarrollar el carácter. Si sólo oyes lo que te agrada y sólo actúas en aquello que te ilusiona, estás enterrando tu vida en un veneno mortal.

3. Se considera personas puras de corazón las que no se acercan al poder y a la fama; pero quienes pueden estar cerca sin verse afectadas son las más puras de todas. Se considera personas de espíritu elevado aquellas que ignoran cómo conspirar e intrigar; más quienes saben cómo hacerlo pero no lo hacen, son las de espíritu más elevado.

4. Cuando te halles en una posición de importancia, no pierdas la actitud de retiro rural. Cuando te encuentres de retiro en el campo, mantén los asuntos de estado en la mente. No se necesita por fuerza buscar el éxito en el mundo. No busques la gratitud de los demás; es un beneficio no estar resentido.

5. Al tratar con personas sencillas, es fácil comportarse con gravedad, pero difícil evitar menospreciarías. Al tratar con personas de rango superior, es fácil ser respetuoso con ellas, pero difícil ser corteses.

6. A quienes se aproximen a ti con riquezas, respóndeles con compasión. A quienes se acerquen a ti con su rango, respóndeles con justicia. 

7. En tiempos de orden se debe ser preciso; en tiempos turbulentos se debe ser flexible. En tiempos de degeneración han de combinarse precisión y flexibilidad. Al tratar con buena gente se ha de ser magnánimo; al tratar con mala gente se ha de ser estricto. En el trato de la gente normal ha de combinarse la magnanimidad y el sentido de lo estricto.

8. Mientras que una persona no se haya liberado del deseo de celebridad, incluso si desprecia el principado y se contenta con la pobreza, todavía es prisionera de los sentidos. Mientras que uno no se despoje del aventurerismo impulsivo, aunque se ayude al país, se trata simplemente de una hazaña.

9. Si temes que la gente sepa que has hecho algo malo, hay algo bueno en lo malo. Si estás ansioso porque la gente sepa que has hecho algo bueno, entonces hay algo malo en lo bueno.

10. Si el 90 % de lo que dices es acertado, no serás forzosamente elogiado como excepcional; pero si una sola afirmación es errónea, todo el mundo te reprochará este error Si funcionan nueve de cada diez planes, no considerarán forzosamente que tienes éxito; pero si un solo plan falla, te colmarán de injurias. Por ello, las personas iluminadas prefieren el silencio a la irreflexión y la ineptitud a la listeza.

Extraído de:

Wowfactory.cl


domingo, 14 de junio de 2015

Pirámide de Maslow: la jerarquía de las necesidades humanas

Pirámide de Maslow: la jerarquía de las necesidades humanas

Pirámide de Maslow: la jerarquía de las necesidades humanas

La Pirámide de Maslow

La Pirámide de Maslow es una teoría psicológica que inquiere acerca de la motivación humana. Según Abraham Maslow, un psicólogo humanista, nuestras acciones están motivadas para cubrir ciertas necesidades. Es decir, que existe una jerarquía de las necesidades humanas, y defiende queconforme se satisfacen las necesidades más básicas, los seres humanos desarrollamos necesidades y deseos más elevados. Maslow introdujo por primera vez el concepto de la Piramide de Maslow en su artículo “A Theory of Human Motivation” en 1943 y en su libro “Motivation and Personality”.

Mientras algunas escuelas existentes en esa época (el psicoanálisis o el conductismo) se centraban en conductas problemáticas y en el aprendizaje desde un ser pasivo, Maslow estaba más preocupado en aprender sobre qué hace a la gente más feliz y lo que se puede hacer para mejorar el desarrollo personal y la autorrealización. Como humanista, su idea es que las personas tienen un deseo innato para autorrealizarse, para ser lo que quieran ser. Para aspirar a las metas de autorrealización, antes han de cubrirse las necesidades anteriores como la alimentación, la seguridad, etc. Por ejemplo, solo nos preocupamos de temas relacionados con la autorrealización si estamos seguros que tenemos un trabajo estable, comida asegurada y unas amistades que nos aceptan.

En la Piramide de Maslow, desde las necesidades más básicas hasta las necesidades más complejas, esta jerarquía está compuesta por cinco niveles. Las necesidades básicas se ubican en la base de la pirámide, mientras que las necesidades más complejas se encuentran en la parte alta. Las cinco categorías de necesidades de la Piramide de Maslow son: fisiológicas, de seguridad, de afiliación, de reconocimiento y de autorrealización; siendo las necesidades fisiológicas las de más bajo nivel, y subiendo niveles en el orden indicado.

Tipos de necesidades

Maslow habla en la Pirámide de Maslow sobre las necesidades instintivas y hace una distinción entre necesidades “deficitarias” (fisiológicas, de seguridad, de afiliación, de reconocimiento) y de “desarrollo del ser” (autorrealización). La diferencia existente entre una y otra se debe a que las “deficitarias” se refieren a una carencia, mientras que las de “desarrollo del ser” hacen referencia al quehacer del individuo. Satisfacer las necesidades deficitarias es importante para evitar consecuencias o sentimientos displacenteros. Las necesidades del “desarrollo del ser” son importantes para el crecimiento personal, y no tienen que ver con el déficit de algo, sino con el deseo de crecer como persona.

La Piramide de Maslow tiene 5 niveles de necesidades:

1. Necesidades fisiológicas

Incluyen las necesidades vitales para la supervivencia y son de orden biológico. Dentro de este grupo, encontramos necesidades como: necesidad de respirar, de beber agua, de dormir, de comer, de sexo, de refugio. Maslow piensa que estas necesidades son las más básicas en la jerarquía, ya que las demás necesidades son secundarias hasta que no se hayan cubierto las de este nivel.

2. Necesidades de seguridad

Las necesidades de seguridad son necesarias para vivir, pero están a un nivel diferente que las necesidades fisiológicas. Es decir, hasta que las primeras no se satisfacen, no surge un segundo eslabón de necesidades que se orienta a la seguridad personal, al orden, la estabilidad y la protección. Aquí se encuentran: la seguridad física, de empleo, de ingresos y recursos, familiar, de salud, etc.

3. Necesidades de afiliación

Maslow describe estás necesidades como menos básicas, y tienen sentido cuando las necesidades anteriores están satisfechas. Ejemplos de estas necesidades son: el amor, el afecto y la pertenencia o afiliación a un cierto grupo social y buscan superar los sentimientos de soledad. Estas necesidades se presentan continuamente en la vida diaria, cuando el ser humano muestra deseos de casarse, de tener una familia, de ser parte de una comunidad, ser miembro de una iglesia o asistir a un club social.

4. Necesidades de reconocimiento

Tras cubrir las necesidades de los tres primeros niveles de la Pirámide de Maslow, aparecen las necesidades de reconocimiento como la autoestima, el reconocimiento hacia la propia persona, el logro particular y el respeto hacia los demás; al satisfacer dichas necesidades, la persona se siente segura de sí misma y piensa que es valiosa dentro de la sociedad; cuando estas necesidades no son satisfechas, las personas se sienten inferiores y sin valor.

Según Maslow existen dos necesidades de reconocimiento: una inferior, que incluye el respeto de los demás, la necesidad de estatus, fama, gloria, reconocimiento, atención, reputación, y dignidad; y otra superior, que determina la necesidad de respeto de sí mismo, incluyendo sentimientos como autoconfianza, competencia, logro, independencia y libertad.

5. Necesidades de autorrealización

Por último, en el nivel más alto se encuentran las necesidades de autorrealización y el desarrollo de las necesidades internas, el desarrollo espiritual, moral, la búsqueda de una misión en la vida, la ayuda desinteresada hacia los demás, etc.

Críticas a la Pirámide de Maslow

Pese a que algunas investigaciones dan soporte a la teoría de Abraham Maslow, la mayoría de los datos recopilados en muchas investigaciones no parecen ir en la misma línea que la Piramide de Maslow. Por ejemplo, Wahba y Bridwell (1986) concluyen que hay poca evidencia para demostrar la jerarquía postulada por Maslow. Además, la Piramide de Maslow también ha recibido críticas por ser difícil de probar su concepto de autorrealización. La investigación de Maslow en este sentido, estaba basada en una muestra de individuos muy pequeña. La crítica a su metodología hace referencia a que él mismo eligió a las personas que consideraba autorrealizadas, tras leer sobre ellos o hablar con ellos y llegar a conclusiones acerca de lo que es la autorrealización. Algunas de las personas a las que investigó son Albert Einstein o Eleanor Roosvelt.

Independientemente de estas críticas, la Pirámide de Maslow representa un aporte importante en un cambio de visión dentro de la psicología y contribuyó a establecer una tercera fuerza dentro de la profesión (las otras dos fuerzas principales eran el psicoanálisis y el conductismo). Su enfoque respecto de la psicología y de la vida en general inspira entusiasmo, ya que no considera a las personas como seres pasivos, ni se centra en las conductas patológicas. La Piramide de Maslow ha tenido una gran repercusión no solamemente en la psicología, sino que también ha sido importante en el mundo empresarial o en el deporte, por ejemplo. En un estudio publicado en 2011, investigadores de la Universidad de Illinoispusieron a prueba la Piramide de Maslow y descubrieron que la satisfacción de las necesidades de la pirámide correlacionaban con la felicidad de la persona. Pero esta investigación, al contrario que la teoría de Maslow, concluyó que las necesidades de reconocimiento y autorrealización también eran importantes pese a que no estuvieran cubiertas las necesidades más básicas.


miércoles, 10 de septiembre de 2014

5 tipos de líderes ( en la ficción ), con cual te identificas?

En muchas ocasiones, en las series de televisión se reflejan o se caricaturizan diversas personalidades que nos podemos encontrar fácilmente en nuestro día a día. Entre los personajes de ficción, también se pueden encontrar las distintas maneras que tienen de ejercer el liderazgo algunas personas.

Pero, ¿con quién se identifica usted o a quién le gustaría imitar? ¿Se siente más un Don Draper o es más parecido a Cersei Lannister? Para contestar a estas preguntas, el portal CNNExpansión ha reunido a los seis personajes de ficción más populares y ha remarcado su tipo de liderazgo. Una ayuda para fortalecer sus cualidades y mejorar sus defectos:

Líder directivo: Don Draper (Mad Men) y Gus Fring (Breaking Bad). Ambos son unos líderes visionarios, que sitúan sus objetivos a largo plazo, y necesitan de un equipo apasionado por su trabajo, muy competente y, a ser posible, reducido. Este tipo de liderazgo también necesita de alguien que, como el protagonista de Mad Men, esté abierto a las críticas y no se tome personalmente los comentarios de los demás.

Líder marcapasos: Charles Carson (Downton Abbey). Este mayordomo jefe, que tiene un gran sentido de la justicia y que es muy respetado por su equipo, posee una gran virtud como es la integridad. Sin embargo, este tipo de liderazgo es el de una persona obsesiva, que no escucha demasiado a su equipo y que debería aprender más a confiar en él, según explica el portal.

Líder democrático: Olivia Pope (Scandal). Para esta abogada, que tiene como cliente suyo al mismísimo presidente de EEUU, la democracia es el eje fundamental de su liderazgo. Pope, demasiado exigente, en ocasiones pierde el equilibrio entre su vida personal y la laboral. En este sentido, el texto recomienda que si alguien se siente identificado con ella y tiene la posibilidad de elegir a su propio equipo, seleccione a personas adictas a la adrenalina y que siempre digan la verdad.

Líder coercitivo: Cersei Lannister (Game of Thrones). La reina es profundamente ambiciosa y muy directa y clara a la hora de dirigirse a su equipo, quizá demasiado. Cersei debería aprender a dar una retroalimentación positiva a sus colaboradores (en alguna ocasión), otorgar segundas oportunidades y mostrar más consideración por el resto.

Líder afiliativo: Yvonne 'vee' Parker (Orange is the new black). Un liderazgo como el que ejerce esta reclusa se basa en un buen equipo y se centra más en las personas que en las tareas que deben cumplir. Parker es muy buena a la hora de trazar estrategias, algo importante pero no lo único, pero acabaya cayendo en la manipulación e incluso en la crueldad.  

Con cuál te identificas?

lunes, 1 de septiembre de 2014

¿Cómo tener Reuniones de Trabajo Efectivas.?

Hoy en día es un tremendo mal de las empresas, como ex ejecutivos de multinacionales algo que recordamos con frecuencia , es la cantidad de reuniones que permanentemente teníamos agendadas día tras día , teniendo muchas veces que salir de una reunión para poder alcanzar a llegar a otra. Sin duda uno de los "males" en los tiempos actuales.
Toma nota de todas las propuestas, ideas y conclusiones que hayan surgido del intercambio y compártelas con tu equipo
Aunque muchas veces puede resultar fastidioso el llamado de un jefe para una reunión, estas instancias son necesarias para mantener a flote cualquier empresa y sacar lo mejor de cada miembro del equipo. No obstante, su eficacia dependerá en gran medida de la forma en la que se organicen. Para evitar que se conviertan en un pérdida total de tiempo, te presentamos 6 claves para organizar una reunión de trabajo productiva, publicadas por el portal Inc.






1. Evalúa si la reunión es estrictamente necesaria. Cuando estas instancias pasan a ser parte de la cotidianidad de la oficina, probablemente se transformarán en charlas sociales sin ningún fin aparente y todos perderán el tiempo. Antes de llamar a nadie a la sala de reuniones debes agotar otros recursos, como enviar emails, postear comunicados en carteleras, etc.


2. Establece objetivos claros. Los objetivos de la reunión deben estar claros para todos los asistentes desde un primer momento. De esta forma evitarás que la conversación se vaya por las ramas y no se llegue a ningún acuerdo o intercambio de ideas productivo.


3. Sé puntual y controla los tiempos. Nadie puede mantener la atención por más de dos horas, además, si haces que la reunión se alargue más de la cuenta resultará aburridísima. Si estableces una hora de comienzo, respétala, controla los tiempos y no dejes que se pierda el punto de foco.


4. No tengas miedo al conflicto. Como ya fue señalado, los comunicados pueden ser transmitidos a través de correos electrónicos u otros medios alternativos. Por lo general, uno de los principios fundamentales de las reuniones es que se genere debate e intercambio de ideas entre los participantes. Por eso no debes tener miedo si surge alguna que otra discusión, esto es totalmente normal. Lo que debes hacer es tratar de moderar el debate y transformarlo de una experiencia positiva para sus protagonistas y para el resto.


5. Prohíbe el uso de dispositivos (incluyendote). Los smartphones y las tablets pueden ser elementos sumamente útiles para una gran cantidad de fines, incluso comunicativos. No obstante, en instancias como reuniones de trabajo suelen ser excusas para la distracción. Si tus colegas están actualizando su estado de Facebook o mirando fotos en Instagram mientras se discuten temas importantes, todo tu esfuerzo será en vano. Por supuesto debes ser tú quien predique con el ejemplo y ser el primero en dejar el celular afuera de la sala de reuniones.


6. Documenta y comparte los puntos tratados. Toma nota de todas las propuestas, ideas y conclusiones que hayan surgido del intercambio colectivo. Para que no queden en la nada debes compartirlas con el resto de los participantes, una vez que termine la reunión.

Por ultimo los integrantes de la reunión deben salir con temas claros o con objetivos y responsabilidades definidos para una próxima reunión. Así no partirás de cero y avanzarás de forma ejecutiva, responsable y efectiva.

lunes, 25 de agosto de 2014

Cuatro motivos por los que no recordamos el nombre de una persona que acabamos de conocer


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Perdona, ¿cómo te llamabas?. Todos hemos hecho alguna vez esta pregunta a alguien a quien nos acababan de presentar y cuyo nombre no recordábamos.

Cuando nos presentan a una persona, o a varias, totalmente desconocidas, es muy habitual que en cuestión de segundos no recordermos sus nombres. Esta situación se puede volver algo incómoda si a continuación entablamos una conversación con dicha persona.

Pero, ¿por qué no recordamos los nombres de las personas que nos acaban de presentar?. Un artículo del magacín The Atlantic explica cuatro de los motivos más habituales por los que suceden estos "despistes".

1. Estás más pendiente del siguiente que del que saludas

Es el caso más habitual en fiestas o reuniones en las que te presentan a muchas personas. Se trata de un desafío hacia nuestra memoria, ya que no es fácil que tengas que memorizar varios nombres y asociarlos a una cara repentinamente.

En este tipo de situaciones, los condicionantes más habituales que nos hacen olvidar los nombres son el ruido, la música o el hecho de que estemos más pendientes de la siguiente persona a la que nos van a presentar que de la que nos están presentando en el momento.

Todos estos factores hacen que nos encontremos ante una tarea más complicada de lo que parece para nuestra capacidad mental.

2. No se tiene interés en esa persona

Tener muchas cosas en mente hace que no siempre estemos todo lo atentos que deberíamos al momento de la presentación. Es posible que más adelante esa persona capte tu atención y puedas estar hablando con ella pero que tu no recuerdes su nombre.

El profesor de la Universidad de Kansas, Richard Harris reconoce en Science Daily que hay personas más propensas a este tipo de despistes, mientras que aquellas con más intereses sociales tienen una mayor motivación para recordar los nombres y se esfuerzan para retener este dato.

3. Un fallo en la memoria de trabajo

La memoria de trabajo es la relacionada con el proceso de memorización a corto plazo. Su funcionamiento y capacidad depende de cada uno, por lo que para algunos será más complicado que para otros retener muchos detalles como puede ser el nombre.  Si no te concentras en mantener esa información, se desvanecerá rápido y en el caso de los nombres los datos han de transferirse al sistema cerebral encargado de la memorización a largo plazo.

4. No relacionamos el nombre con nada en particular

Lo que se refiere es que mientras que datos como un nombre no somos capaces de memorizarlos bien, hay otros datos que retenemos con mayor facilidad como las caras o la forma de ser. Por lo tanto, recordaremos mejor un nombre si somos capaces de asociarlo a algún aspecto concreto de la persona como una afición o la ropa que lleva.

www.wowfactory.cl


jueves, 31 de julio de 2014

"House of Cards",interesantes lecciones de liderazgo extraídas de la serie



House of Cards es una de las series del momento.

La serie norteamericana House of Cards, que protagoniza Kevin Spacey y que ha obtenido 14 nominaciones a los Premios Emmy en este 2014, es todo un éxito de audiencia en EEUU y el extranjero.

En esta ficción se realza la importancia de capacidades como el liderazgo, la destreza para manejar los hilos del poder o el control de los medios de comunicación para un hombre de la alta política. Y de ella y su protagonista, varios medios han extraído una serie de interesantes lecciones de liderazgo:

El factor suerte: además de una preparación psicológica y de formación, para alcanzar el éxito hay otro ingrediente sin el que será imposible lograr nuestro objetivo: la suerte.

Rodearse de personas inteligentes: tener un equipo de trabajo inteligente y preparado para los nuevos retos es fundamental para que nuestra idea de empresa se plasme en la realidad de la forma más fidedigna posible.

La información es poder: la información privilegiada siempre nos deja en una posición de ventaja frente a nuestros competidores. A la hora de manejar un equipo, tener la información precisa y saber utilizarla nos convertirá en unos grandes líderes.

Conoce a las personas que te rodean: para el líder de un equipo, es vital conocer a sus miembros y hacerlo no solamente en los aspectos laborales, los detalles personales también son de gran importancia.

El favor como moneda de cambio: siempre está bien que te deban favores. El apoyo mutuo es positivo para ambas partes y será una ayuda fundamental para la nuestra empresa.

Juzga por los resultados: en muchas ocasiones, hay diferentes caminos para llegar a cumplir los objetivos de la empresa. No es tan importante qué camino se coja sino obtener los resultados oportunos.

Planifica y sé paciente: hay que saber cuándo anticiparse a las situaciones a la hora de ejecutar nuestro plan y también ser paciente cuando sea necesario. Para ello es necesario tener la capacidad de analizar las situaciones de forma realista y objetiva.

Ser un sinvergüenza: para conseguir llegar a ser un buen líder es necesario ser claro y tajante. En ocasiones, incluso ser un poco sinvergüenza puede ayudarnos.

Hay varias de estas lecciones que parecen terribles, pero la realidad demuestras que en algún minuto, en una posición de poder , se utilizan completamente. 

lunes, 23 de junio de 2014

10 señales para descubrir si estás ante un mal jefe


Pueden existir cientos de motivos por los que no nos cae bien nuestro jefe pero, ¿es realmente un mal líder o son sólo impresiones personales? 

Las relaciones entre jefe y equipos pueden ser sumamente complicadas. Si bien existen casos de buen relacionamiento, muchas veces los jefes son el blanco de feroces críticas y aprensiones de todo tipo. Pero, ¿qué tan justificadas son? Según una encuesta realizada por el portal Trabajando .com más de un 60% de los chilenos asegura que les molesta que sus jefes no valoren su trabajo.


 A continuación, te presentamos las 10 señales para descubrir si estás ante un mal jefe

1. Es indeciso. En un mundo que se mueve a un ritmo vertiginoso, es esencial tomar decisiones rápidas. Más allá del resultado, la especulación nunca lleva a un buen desenlace.


2. Es impaciente. Los malos jefes suelen tener la mecha corta y estallan lanzando toda su frustración contra sus empleados ante el primer error. Por el contrario, los buenos líderes motivan a sus subordinados a aprender de estas equivocaciones.


3. Dramatiza demasiado. Muchas veces las cosas no salen como las planeamos, pero no es el fin del mundo. El jefe debe ser el que brinde calma al equipo y no sobredimensione los problemas.


4. Quiere controlar todo. Para poder dar lo mejor de sí, las personas necesitan espacio e independencia. Controlarlo todo no sólo es imposible, también es contraproducente.


5. No se conoce a sí mismo. Antes de poder dirigir un equipo, es fundamental tener insight, anticipar las reacciones que podemos tener, los sentimientos que afloran ante determinadas situaciones, etc.


6. Tiene favoritos. Si bien es natural tener mayor afinidad con determinadas personas, un jefe debe ser neutral y darle la oportunidad de brillar a todos por igual.


7. Es vanidoso por demás. Cuando se alcanza una meta, el logro es de todo el equipo y el jefe no debe llevarse toda la gloria. Un buen líder no permite que su buena autoestima se transforme en vanidad.


8. Es inflexible. No siempre se tiene la razón. Un buen líder siempre se muestra abierto a nuevas alternativas, aunque la iniciativa no necesariamente nazca de él.


9. Culpa a los demás. Las fallas en el equipo siempre son responsabilidad primera de su líder, por más que éste no haya sido el culpable directo del error. Humillar a un empleado frente a sus colegas es una pésima táctica para imponer autoridad.


10. No es agradecido. Los logros alcanzados son fruto del trabajo de todos, sin importar el rango que ocupen en la escala organizativa. Un buen jefe debe preocuparse por ser agradecido y que las personas se sientan reconocidas por su buena labor.